venerdì 17 agosto 2012

17 capitulo


Hola chicas cumplieron con su mision(jaja)asique hoy MARATOOOOOOOON !!Estoy muy feliz,no se ve, no?jajaja


àRecuerdense de votar cual nove prefieren en la encuesta,los prologos de las noves estan en el post de antes...


+8 FIRMAS Y OTRO






Cuando Kevin sé fue, se preguntó qué estaba haciendo pensando tanto en Lali en Europa cuando tenía tantas cosas importantes en que centrar su atención allí, en Sidney.
Pero lo cierto era que no podía quitársela de la cabeza. En lugar de centrarse en su cercano encuentro con Mario Testare, el diseñador de moda que trabajaba para él hacía unos años, o en la reunión que tenía con los ejecutivos de la sección de productos de cuero, sólo lograba pensar en Lali.
Jamás había imaginado que llegaría a verse en una situación como aquélla. Por supuesto que había pensado en casarse y tener hijos; a fin de cuentas era en parte griego. Pero nunca había contado con la intensidad de los sentimientos que despertaba Lali en él.
¡Ya estaba pensando en ella de nuevo! Pero sólo por los problemas que le estaba causando por haberse negado a firmar el contrato, se dijo con firmeza.
Pero no era sólo su firma en el contrato lo que necesitaba. Lo que necesitaba era su boca, su cuerpo, su voz susurrándole dulzuras...
«¡Basta!», se dijo. Lo que tenía que conseguir era que creara un nuevo perfume para Francine. Un perfume asequible, que tenía que estar elaborado a partir de productos sintéticos... aunque en el calor de la discusión que habían mantenido Lali había sugerido que estaba dispuesta a llegar a un acuerdo para trabajar con una mezcla de productos.
Pero sería una mezcla con tantos ingredientes caros que el perfume acabaría siendo demasiado caro, se dijo con firmeza.
Pero, ¿y si había algún modo de conseguir que el perfume se elaborara a un precio razonable? Si lograra demostrarse a sí mismo que era posible y luego lograra convencer de ello a la junta directiva...
¿Pero por qué -estaba perdiendo un tiempo del que no disponía pensando en la mujer más incordiante e imposible que había puesto Dios sobre la tierra?
Tomó de nuevo el teléfono. Sospechaba que Raoul no estaba atendiendo sus llamadas por temor a que le exigiera que le devolviera el dinero que le había adelantado. Sabía que debía hacerse con Francine o enfrentarse a la posibilidad de un voto de pérdida de confianza por parte de su junta directiva. ¡Y para ello necesitaba hablar con Raoul! ¡Y con Lali!
Colgó el teléfono con el ceño fruncido. Si Raoul no quería responder a sus llamadas, sólo podía hacer una cosa.
Se acercó a su escritorio y pulsó el botón del intercomunicador para hablar con su secretaria.
-Resérveme un vuelo para Niza, por favor.
-¿También el hotel? -preguntó su secretaria-. ¿Quiere volver a alojarse en el Mougins?
Peter dudó. Mougins. Allí era donde Lali y él...


Lali miró con incredulidad el mensaje electrónico que acababa de recibir. Era una solicitud de Peter para que fuera a Grasse a mantener una reunión en la que resolver las dificultades que se habían, presentado, según los términos del mensaje.
El mero hecho de saber que le había mandado un correo electrónico hizo que su corazón y todo su cuerpo reaccionaran. Si un simple correo electrónico le había producido aquella mezcla de dolor, anhelo y rabia, ¿qué sucedería si lo viera en persona?
Sintió la tentación de ignorar el mensaje, pero no pudo.
Su teléfono sonó mientras miraba la pantalla.
-¡Necesito hablar contigo, Lali! -exclamó Raoul al otro lado de la línea en cuanto ella descolgó.
-He recibido el correo electrónico de Peter, Raoul, y si llamas para tratar de convencerme para que hable con él...
-Tienes que ayudarme, Lali -interrumpió Raoul en tono de súplica-. Si no lo haces podría llevarme a juicio y reclamar el dinero que me adelantó... y si lo hace me veré metido en problemas muy serios.
De manera que Raoul le había mentido y había mentido sobre ella, se dijo Lali. Pero seguía siendo su primo y, extrañamente, le resultaba más fácil perdonarlo a él que a Peter. ¿Porque éste le había hecho más daño? ¿O porque lo amaba mucho más?
«No entres ahí», se aconsejó.
-Nada ha cambiado, Raoul -advirtió a su primo-. No pienso permitir que se quedé con la formula del Myrrh, y tampoco pienso crear un perfume sintético para él.
-Lo único que quiere es hablar de la adquisición de Francine -aseguró Raoul-. Nada más. Y si no aceptas vender, voy a verme metido en líos muy serios.
-Si estás mintiéndome de nuevo... -empezó Lali, pero sabía que ya se estaba ablandando, y sospechaba que Raoul también lo sabía.
Para cuando colgó el auricular había aceptado volver a Francia.
-¿Qué sucede? -preguntó Cande, que había ido con su sobrina adolescente Caroline a visitar a Lali. En aquellos momentos, Caroline estaba explorando la habitación de trabajo de ésta-. ¿Aún sigues pensando en Peter? No has podido quitártelo de la cabeza y olvidarlo a pesar de todo lo que me dijiste, ¿verdad?
Lali le había contado todo lo sucedido en Francia con Peter. O casi todo. Al volver a su casa en Pembroke estaba tan disgustada que no había podido evitar abrirle su corazón. Luego, había asegurado que pensaba comportarse como si no lo hubiera conocido y como si nunca se hubiera enamorado de él. Pero, como muy bien había captado Cande nada más verla, olvidarlo había sido imposible.
-Da lo mismo lo que sienta, Cande. Lo único que quiere de mí es que cree un perfume sintético para él, y eso no lo haré nunca. ¡Nunca! -dijo con firmeza-. He aceptado ir a Francia para verlo, pero sólo por el bien de Raoul. Si cree que puede hacerme cambiar de opinión...
Cande le dedicó una sagaz mirada.
-No me interpretes mal, Lali, por favor. Eres mi amiga y lo último que querría sería ofenderte, pero por todo lo que me has contado sobre Peter, me parece que estáis hechos el uno para el otro y que los dos sois igual de testarudos -mientras Lali fruncía el ceño, Cande siguió hablando-. El amor por sí mismo no basta. Ambos miembros de la pareja deben estar dispuestos a aceptar y comprender el punto de vista del otro. ¿No habéis oído ninguno de los dos la palabra «compromiso»?
Antes de que Lali pudiera responder, Caroline salió del cuarto de trabajo para reunirse con ellas.
-El perfume que llevas es delicioso -dijo en tono nostálgico-. ¿No podrías elaborar alguno parecido pero no tan caro? ¿Algo que se pudiera permitir una pobre estudiante como yo? Cuando Cande y Caroline se fueron, Lali fue a su cuarto de trabajo. El comentario de Caroline sobre su perfume la había hecho sentirse un poco culpable. Era lógico que cualquier mujer quisiera llevar un buen perfume, pero la inocente pregunta de Caroline la había obligado a preguntarse si habría algún modo de que los aromas creados por el hombre pudieran mezclarse para crear un buen perfume asequible a todas las mujeres.
No estaba pensando en aquello porque se estuviera planteando la posibilidad de ceder a las pretensiones de Peter, se dijo. Había sido la nostálgica mirada de Caroline lo que la había impulsado a enfocar las cosas desde otra perspectiva. Sin duda, sería todo un reto para ella.
¡Pero no tanto como ganar el amor de Peter!
Enfadada consigo misma, caminó de un lado a otro de la habitación. ¿Qué clase de mujer era para querer ganar el corazón de un hombre que la había tratado de forma tan humillante?
Trató de centrarse en su trabajo, pero sólo lograba pensar en Peter y en la destructiva escena final que se había desarrollado entre ellos.
¿Tendría idea de cuánto daño le había hecho? Acusarla de...
Lali frunció el ceño al recordar de pronto algo que había dicho. «Eres otra Maria del Cerro».
¿Quién era Maria del Cerro? ¿Y qué tenía que ver con el rechazo que había manifestado hacia ella?
Miró la pantalla del ordenador un momento y enseguida se puso a teclear con dedos temblorosos.
Para cuando terminó de releer la información que había obtenido a través de Internet estaba haciendo verdaderos esfuerzos para contener las lágrimas.
Aparte de la historia en sí, que había leído en diversos periódicos, lo que más la había conmovido había sido la foto de Peter con catorce años, tan alto y desgarbado que casi aparecía hombro con hombro junto a su padre, cuyo rostro contemplaba fijamente en la foto.
Debió de ser una época terrible para toda la familia. Lo que hizo Maria del Cerro con ellos fue terrible. ¡Y qué insultante había sido que la comparara con aquella mujer! Desgarrada entre la exasperación, la rabia y el amor, Lali no sabía si correr a su encuentro en Francia o huir de él.


Que harà Lali?Huir o encontrarse con peter? mmm

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+8 FIRMAS Y OTRO

12 commenti:

  1. MASSSSSSSSSS Y SOCORRO Y YO VOTO POR EL AMOR TRIUNFARA? MAS NOVE PORFA YO CREO QUE TIENE QUE IR A FRANCIA PERO SI HULLE DE EL Y EL LA PERSIGUE ESTARA CHULISIMO BS.

    SOFIA

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  2. masssssssssssssssss noveeeeeeeeeeeeeeeeeeee el amor ttiunfara

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  3. Por fin se da cuenat q su primo es el culpable y yo q ella no lo cubro!Debe ir y hablar estoy segura q cdo sepan cómo es el tema y siental lo q los une pueden intentar un acuerdo,no pueden sacrificar Tanto Amor!

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  4. Es necesraio q se encuentren!Trabajando juntos pueden hacer un buen equipo!

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  5. Ninguno debe dejarse influenciar!

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  6. Vamos por el reencuentro, de a poco se van entendiendo1 más!

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  7. MASSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS POR FA TODOS QUIEREN

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  8. massssssssssssssssssssssss o me muero el 8 jajajjajua

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  9. masssssssssssssssssssssssssssssssssssmassssssssssssssssssssss

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  10. Mas porfavor!!!
    Que Lali corra a con Peter.
    Lali tiene que lograr crear un perfume accesible para
    Todas las mujeres y que le ponga el nombre de la
    Abuela de Peter:)
    Gracias por los caps!!
    @Titel842

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